EL PROYECTO DE INVESTIGACIÓN
Cuando pensamos en el futuro de la Región de Murcia es fácil que nos venga a la cabeza el caso del Mar Menor. No sólo por la propia degradación del ecosistema, sino porque el futuro de las poblaciones ribereñas y de la Región depende en gran parte de la recuperación de este ecosistema emblemático.
Recientes investigaciones etnográficas en distintos contextos globales evidencian que la imaginación, las aspiraciones y las esperanzas ayudan a orientar nuestras prácticas presentes hacia los futuros que imaginamos, deseamos y anticipamos. De entre estas investigaciones, es interesante poner la atención en el libro El futuro como hecho cultural, del antropólogo de origen indio Arjun Appadurai, quien llama la atención sobre la importancia de “mirar a la imaginación como una práctica colectiva” (2013: 287), y por lo tanto como articuladora de procesos de movilización social. Appadurai propuso entender “el futuro como un hecho cultural”, lo que inició el llamado “giro hacia el futuro” en ciencias sociales. Este giro da importancia al poder transformador que tienen las orientaciones al futuro (la capacidad de aspirar, de imaginar, o de tener esperanza, etc.) en situaciones de crisis y cambio social.
La importancia de la imaginación es clave para entender lo que Appadurai (2013: 295) llama la “ética de la posibilidad”. Con este concepto se refiere a “aquellas formas de pensar, sentir y actuar que aumentan los horizontes de la esperanza, que amplían el campo de la imaginación, que producen una mayor equidad (...) y que amplían el campo de la ciudadanía informada, creativa y crítica”.
Siguiendo este giro hacia el futuro y el interés en conocer empíricamente las articulaciones de las “éticas de la posibilidad” en el sureste español, este proyecto tiene como objetivo poner la mirada en la construcción de futuros urbanos y ciudadanías medioambientales en la Región de Murcia, centrando la atención en el modo en que la “capacidad de aspirar” y la “ética de la posibilidad” articulan los diferentes discursos y prácticas de recuperación del Mar Menor y su entorno natural, patrimonial y urbano.
Y es que las actuales movilizaciones por parte de distintos colectivos para la recuperación del Mar Menor ilustran a la perfección el modo en que tanto la capacidad de aspirar como la ética de la posibilidad pueden generar dinámicas transformadoras frente a los problemas cotidianos.
COMO SE REALIZARÁ ESTA INVESTIGACIÓN
A través de la inmersión etnográfica, me adentraré en las realidades cotidianas de los actores principales en el intento de recuperación del Mar Menor. Teóricamente, partiré de los trabajos sobre reestructuración urbana y territorial en la Región de Murcia realizada por el Grupo de Investigación Reestructuración Territorial y Desigualdad del Departamento de Sociología de la Universidad de Murcia, para ponerlos en discusión con los debates actuales sobre ciudadanías urbanas, las sociologías de la ética y la moral, y las antropologías de la temporalidad y del futuro.
Es decir, si bien el caso empírico en el que centraré mi atención tiene lugar en un ecosistema como es el Mar Menor, el interés analítico de este proyecto no descansa tanto en la cuestión medioambiental, sino en otros dos importantes elementos que están interconectados: la co-construcción de ciudadanías y futuros urbanos y medioambientales a través de la ética de la posibilidad y el poder transformador de la imaginación aspiracional. En otras palabras: no centraré mi atención en la cuestión de la degradación del ecosistema, sobre la cual ya hay estudios desde otras disciplinas científicas, sino que la centraré en las aspiraciones, expectativas, y esperanzas que articulan el lenguaje de derechos y las prácticas de movilización de distintos grupos de la sociedad civil que se organizan para conseguir la recuperación del ecosistema y su entorno urbano.
Así, dentro del marco anteriormente explicado, este proyecto pretende responder a las preguntas: ¿cuáles son los imaginarios de futuro que hay detrás de los intentos de recuperación del Mar Menor? ¿Qué expectativas tienen los actores principales?, ¿Qué aspiraciones urbanas y esperanzas articulan las acciones y procesos de movilización de los distintos grupos? ¿A qué amenazas tratan de enfrentarse? ¿Qué formas específicas adquieren las “éticas de la posibilidad” en estas dinámicas sociales? ¿Cómo se expanden los “horizontes de esperanza” y aumenta “el campo de la ciudadanía informada, creativa y crítica”?
Son estas últimas preguntas, finalmente, las que permiten poner en discusión el estudio de las aspiraciones urbanas de Appadurai y el estudio de la formación de subjetividades políticas urbanas o “ciudadanías urbanas”. Como bien ha señalado James Holston (2009), el proceso de urbanización global ha venido de la mano de un proceso de democratización global. Sin embargo, las promesas democráticas no siempre han estado a la altura de lo que las sociedades esperan; ante esto, diferentes grupos sociales articulan sus demandas a través de un lenguaje de ciudadanía urbana y derechos. Es así cómo este proyecto entiende que se generan las reivindicaciones de recuperación del Mar Menor: a través de orientaciones al futuro y creación de ciudadanías urbanas.